Todo esa noche parecía una película. La decoración prefectamente arreglada e iluminación justa. Hasta banda sonora tenía, una melodía tranquila que encajaba perfectamente con la atmósfera del momento. Entonces empezó a hablar.
"Estuve pensando que no es bueno que yo siga acá, para beneficio suyo y mío. Me voy a ir a Perú la semana que viene. Los amigos que tengo acá son un desastre y yo, al estar mal, necesito otra cosa. Allá soy realmente feliz: voy a la playa, como mariscos y descanso en el campo. Lo mejor para todos es que me vaya".
Y así, otra vez, se termina todo. Continuará...
No hay comentarios:
Publicar un comentario